SENTIRTE AMADO

El miedo a ser abandonado. El terror de estar solo para siempre. La ansiedad de tener que depender completamente de otra persona.

El pánico de sentirse expuesto y de una vulnerabilidad insoportable. El temor a la muerte inminente de ti mismo y de todos a tu alrededor.

Estos son los grandes temores que llegan cuando despiertas, cuando estás por quedarte dormido, y mientras sueñas a lo largo de esta vida.

En tu voluntad de asumir un riesgo, de sentirlo todo, de verdaderamente permitirte que los demás te importen, y al exponerte en una especie de angustia eterna, te encuentras cara a cara con el miedo más devastador que hayas conocido, pero que nunca habías podido articular: sentirte amado.

Porque cuando eres realmente amado, cuando eres tomado en cuenta por completo, cuando eres plenamente aceptado, es el fin de tu mundo como lo conocías. Nada volverá a ser igual. Jamás serás de nuevo capaz de pretender que eres algo menos que precioso e íntegro tal y como eres. Las implicaciones serán vertiginosas si te sumerges completamente en ello.

Es sumamente emocionante ser visto y acogido de esta manera, pero también es aterrador ya que ahora te encuentras completamente desnudo, en tu estado más puro y dolorosamente abierto. Incluso el paso de la brisa se siente como si fuera demasiado, porque atraviesa tu piel para llegar hasta tu corazón. Un amanecer, la inocencia de un pequeño bebé, las hojas de otoño, la mirada de tu amante – quizás nunca vuelvas a estar protegido. Las partículas de amor están interpenetrando todo tu mundo sensorial y ya no estás tan seguro de que tu corazón y tu sistema nervioso puedan soportarlo.

Eres libre de ser lo que quieras ahora – ya no estás atado a ningún pasado que creíste anhelar, ya no estás limitado a lo limitado, estás dispuesto a arriesgar todo por el amor, y eres libre de ser el osado indomable que realmente eres.

Matt Licata