Rituales que te harán más feliz según la neurociencia
Por más consejos que podamos ver en Internet sobre cómo ser feliz, se trata, en la mayoría, de consejos basados en ideas de autores que no cuentan con la información suficiente para poder aconsejar sobre temas que requieren de un análisis profundo. Pero si no cuentas con ninguna otra referencia más que Internet lo mejor será que recurras a consejos de la neurociencia.
La neurociencia es la ciencia que explica “cómo es que actúan millones de células nerviosas individuales en el encéfalo para producir la conducta” y cómo es que variables externas como el medioambiente y nuestra interacción con otras personas inciden positiva o negativamente en dichas células.
La revista Time publicó cuatro consejos del neurocientífico Alex Corb basados en los hallazgos de su libro The Upward Spiral (2015) en el que ahonda en los procesos del cerebro que causan depresión y ofrece soluciones basados en estudios psicológicos y cerebrales para erradicarla. Consejos para redirigir pensamientos negativos en la vida diaria y “crear una creciente espiral hacia una vida feliz y saludable”.
En el texto de Corb no se encontrará la solución final a los problemas de depresión pero sí se incluyen conejos para mejorar la manera en la que procesamos la información interna y externa. Aquí te incluimos cuatro de los pasos para empoderar la mente y usarla para enfrentar mejor la vida.
1. La pregunta más importante cuando te sientas deprimido
¿Por qué el cerebro nos hace sentir culpables o avergonzados?
“El orgullo, la vergüenza y la culpa activan distintos circuitos neuronales como la ínsula, la amigdala, el núcleo accumbens, y la corteza media prefrontal. El orgullo es la más poderosa de estas emociones al activarse en la mayoría de las regiones cerebrales salvo en el núcleo accumbens en donde la vergüenza y la culpa se imponen.
Por otro lado preocuparse de más ayuda a calmar el sistema límbico incrementando la actividad en la corteza prefrontal media y aunque parezca contradictorio demuestra que si te sientes ansioso y haces algo al respecto, como preocuparte, por lo menos ya haces algo que es mejor que hacer nada.
¿De qué estamos agradecidos?
El sentimiento de gratitud activa la región encefálica que produce la dopamina además de estimular el neurotransmitor de la serotonina tal y como lo hace el prozac. Si no tienes nada que agradecer, la sola manera de buscar qué agradecer ayuda. “Acordarse de ser agradecido es una forma de inteligencia emocional“, entre más inteligencia emocional se tenga más agradecido se estará.
La gratitud hace también que el cerebro sea más feliz y contribuye a establecer un esquema de intercambio emocional positivo entre las relaciones sociales.
2. Categoriza los sentimientos negativos
Reconocer los sentimientos negativos y llamarlos por su nombre reduce su impacto emocional y cerebral. Suprimir los sentimientos negativos resulta contraproducente. “Se concluyó que personas que trataban de evadir su negatividad fallaron en hacerlo. Mientras pensaban que exteriormente se veían bien, por dentro su sistema límbico continuaba despierto como si acabaran de experimentar el sentimiento”.
El libro recomienda describir la emoción en máximo dos palabras, nombrarlo ayuda a superarlo. Categorizar ayuda a concientizar.
3. Toma la decisión
Tomar decisiones ayuda a reducir las ansiedades y preocupaciones. Impulsa a que el cerebro evite seguir rutinas e impulsos negativos. Tomar decisiones ayuda a encontrar soluciones que calman al sistema límbico.
Tomar la decisión correcta es difícil pero hay que saber que nunca existirá la decisión más correcta. Intentar ser perfecto abruma al cerebro de emociones y hace que pienses que pierdes el control. “Es mejor ser suficientemente bueno que perfecto”. Tomar una decisión trae control y reduce el estrés.
Cuando tomas una decisión para alcanzar un objetivo, lo importante es poder alcanzarlo. Las personas se sienten mejor cuando alcanzan un objetivo por sus propios méritos que por la suerte. El artículo explica con un ejemplo en cómo ir al gimnasio como un deber causa estrés más que placer. “Se deben escoger las cosas que nos gustan; que nos gusten las cosas que escogemos”·
4. Contacto físico
Las relaciones son muy importantes para que el cerebro experimente felicidad. La oxitocina se libera cuando tocamos. Tocar es saludar de mano o dar unas “palmaditas” en la espalda o abrazar a alguien cercano. Ayuda a reducir el dolor, a trabajar mejor en equipo y a ser más convincente.
Se hizo un experimento con mujeres casadas que recibían pequeños toques (shocks) eléctricos. Su cerebro registró un patrón de respuesta alto en zonas de dolor y ansiedad. A otro grupo de mujeres se les permitió tomar la mano de su esposo y el cerebro mostró poca actividad en las mismas zonas que el primer grupo.
El texto recomienda por lo menos cinco abrazos al día. Si no eres de los que dan abrazos, los masajes son buena opción. También aconseja visitar a un ser querido antes de mandarle un mensaje de texto.
Para concluir los cuatro consejos, así los resumimos:
1) Pregunta por lo que estás agradecido (si no lo sabes la sola pregunta ayuda)
2) Categoriza las emociones negativas (cuando las llamas por su nombre el cerebro deja de preocuparse por ellas)
3) Toma la mejor decisión aunque no encuentres la perfecta.
4) Intenta el contacto físico antes que los mensajes de texto.
El contacto físico con los demás ayuda a superar los sentimientos de soledad, sentimientos negativos que si se categorizan ayudan a ser superados. Tomar una decisión ayuda a que el cerebro reduzca cantidades de estrés y agradecer fortalece la conciencia que tenemos sobre nosotros y nuestro entorno.
Por Antonio Harfuch